Siendo todavía un niño llego a Barcelona un tímido jugador argentino que pocos años después haría levantar al mundo entero con su juego. Saliendo del pasado para meternos en el presente, este Mundial -suyo nuevamente por imposición del mundo futbolístico- lo encuentra maduro y un poco más relajado. El futbolista que sueña con retirarse en Rosario Central llegó en el mejor momento de su carrera al Mundial de Brasil 2014. Su 1º gol en una Copa del Mundo fue en la dramática y agónica victoria de octavos de final sobre Suiza, en San Pablo. A la espera de firmar su nuevo contrato y, sobre todo, de que el club diseñe un proyecto deportivo tentador, Messi manda un mensaje. Con ayuda de un psicólogo y sobre todo el acompañamiento incondicional de su familia, volvió a apostar por su pasión: “Tengo muchos conocidos que me dicen que me quede en París tomando un café enfrente de la Torre Eiffel, pero yo prefiero que me puteen 45 millones de personas y vestir la camiseta de la Selección”. El último partido de Lionel Messi con la camiseta de PSG se salda sin un gol suyo, por lo que termina con 16 anotaciones en la Liga de Francia.

Sus 295 partidos, 93 goles, 111 asistencias (récord del club) y 18 títulos (cinco Ligue 1, cinco Copas de Francia, cuatro Copas de la Liga y cuatro Supercopas de Francia) lo transformaron en ídolo del conjunto parisino, en el que pudo compartir su última temporada junto a Lionel Messi. Pero en un viaje a su ciudad, en un partido con amigos sufrió una grave lesión en la rodilla que lo marginó del fútbol. Sin embargo, una lesión muscular del recto anterior, en el muslo derecho, de grado 1 lo sacó a la media hora del choque contra Bélgica en cuartos y del resto del Mundial, incluida la final perdida ante Alemania. En realidad fue el técnico José Pékerman el que le sacó obligaciones al no ponerlo en el partido definitivo ante Alemania, en el partido que marcó el adiós de Argentina en cuartos de final. Después de Rusia, Lionel Scaloni le había aconsejado a Di María que nunca deje la Albiceleste, que sea el técnico el que tome la decisión. Y fue justamente el propio Scaloni el que prescindió meses después del extremo para darle más rodaje al joven Nicolás González por izquierda.

Pese a haber jugado los cinco partidos del Mundial de Sudáfrica 2010, su actuación no lo dejó conforme: «Tuve que aprender a defender, me costó adaptarme a una posición donde no juego. No rendí para nada bien. Estoy disconforme totalmente con mi juego». Para colmo, a principios de 2014, un polémico gesto en el choque ante Celta, al ser sustituido por el galés Gareth Bale (un fichaje multimillonario en su posición), no pasó inadvertido. Lo colocó en una nueva posición a la derecha, le agregó sacrificio y lo disciplinó tácticamente. La nueva camiseta de Argentina saldrá a la venta a partir del próximo lunes 26 de diciembre. Tras la victoria de Argentina en el Mundial de Qatar, todo el mundo busca adquirir la nueva camiseta que incluye la tercera estrella. André Gomes y Jordi Alba tocaron el esférico antes de que llegara a las botas de Leo Messi, que acabó marcando el gol de la victoria. Colocamos los comentarios como si fuéramos forofos de bufanda, aquí la mayoría de madridistas criticando la celebración de Messi, la encuesta dice cual fue la mas ofensiva y por lo que veo fue la de Messi , no por que faltara el respeto, sino por la pupa que ha dejado en el recuerdo Madridista, de hay todos los comentarios hacia esa celebración.

El delantero renovó su contrato como jugador nueve veces durante las dos décadas que duró su etapa en el equipo catalán. Además de convertirse en el jugador argentino con más partidos en las historia del país, el y el máximo goleador, MisterChip, el experto en estadísticas del fútbol, también resaltó que Messi ha generado 11 goles y 9 asistencias, por lo que 20 goles han pasado por sus botines. Después de Brasil 2014, se terminó su exitoso ciclo en Real Madrid, donde jugó 190 partidos, anotó 35 goles y cosechó 6 títulos. Con el portugués, Di María se ganó la titularidad y empezó a cosechar títulos con el Merengue. La vida de Di María se caracteriza por la lucha, como la de su hija Mía, nacida en abril de 2013 con apenas seis meses de gestación. Mientras tanto, el eléctrico Di María seguía esforzándose, jugando y corriendo. En los más de dos duros meses que la bebé pasó internada, fue muy importante el sostén de Jorgelina, a la que le dedica los goles con un corazón. Pese a su buen arranque con la histórica camiseta 7 de los Diablos Rojos, duró apenas un año en Inglaterra (32PJ, 4 goles).