La polémica ha venido después cuando Pedrosa ha publicado una imagen en sus redes sociales y algunos aficionados han empezado a criticarle duramente por este gesto: «eres un judas», «ojalá revientes», «por qué no has esperado al túnel de vestuarios» o «la has cagado», son sólo algunos de los mensajes más duros. Estas son sólo algunas menciones que han llegado a la última publicación del instagram del defensa, que ni siquiera es de este partido, sino de otro hace semanas. Son muchos los que le insultan y le faltan al respeto por un gesto tan habitual. La misma información apuntó que Messi agradeció el gesto pero la rechazó. Pedrosa, jugador del Espanyol, tras terminar el encuentro se acercó a Messi para cambiarle la camiseta. Es lo que le ha ocurrido y está sufriendo el joven Adrián Pedrosa, camiseta messi un canterano del equipo perico que tuvo la ‘osadía’ (o así lo considera un sector del espanyolismo) de pedirle la camiseta a Messi tras el derbi que ganaron los blaugrana. Fin. Lo hubiera hecho igual si Leo hubiera militado en cualquier otro equipo. Lo curioso fue que el goleador explicó que el ex mediocampista del Inter y Chelsea fue quien le había pedido la casaca: «Antes de empezar el partido me dijo que tenía un ahijado que era hincha de Gimnasia, y que por culpa mía se había hecho hincha del club porque era su ídolo. Me dijo si podíamos intercambiar las casacas cuando termine el partido y le dije que sí… pero cuando terminó el primer tiempo, Verón me llamó y me pidió el cambio, y sin darme cuenta me la saqué y se la dí».

Las novedades fueron los dos canteranos, Lluís y Adrià Pedrosa, que integraban una defensa de cinco con el objetivo de parar a Messi, Suárez y Coutinho. Una de las imágenes del final del partido en el Camp Nou ha sido cuando el canterano del Espanyol, Adrián Pedrosa, se ha acercado a Messi para saludarle e intercambiarse la camiseta. Las redes sociales, siempre viperinas y en ocasiones sobrevaloradas, han aprovechado para cargar contra el canterano blanquiazul. Pero en frío y con perspectiva, señalar a un canterano es un error. El joven canterano de 20 años es una perlas de club. Ha debutado esta temporada y en el club confian en que con partidos y paciencia acabe siendo uno de los futbolistas claves del equipo catalán. El capitán del Barcelona, Lionel Messi, fue expulsado este domingo por primera vez con la camiseta azulgrana en la final de la Supercopa de España que el equipo azulgrana perdió 3-2 en la prórroga contra el Athletic de Bilbao. Vino el momento cumbre contra Alemania y sufrí cada jugada, alenté como un hincha nacido de verdad en el país austral, y a falta de la camiseta ansiada, me colgué de sucedáneo otra, también de Messi, pero del Barcelona y con el número 19. Era la cosecha de un capricho anterior, en el 2006, cuando dejé estupefacta a una amiga catalana que presagió le pediría la de Ronaldinho con el 10 y no la de un meñique jovencito, estrenado recién como jugador azulgrana.

La imagen fue captada por las cámaras que, como suele ser habitual, no se despegan de Messi, lo que ha sido considerado como una ofensa muy grave a sus colores por un sector de su propia afición. Es comprensible que el intercambio de camisetas entre los jugadores no fuera la imagen que los aficionados, en caliente, quisieran ver tras perder el derbi. El atacante, y flamante fichaje “podría llegar a vender 5 de cada 10 camisetas y así evitar que la caída de las ventas fuese más allá del 30% a corto plazo”, según Ciria. Se ha formado en las categorías inferiores de la casa y su ADN es tan perico como el escudo. Lionel Messi dará su versión del final de su era legendaria en Barcelona este domingo en el Camp Nou, desde cuya sala de conferencias hablará el domingo desde las 7 am (hora de la Argentina), tal como el viernes el presidente del club, Joan Laporta, para explicar que por las nuevas restricciones de La Liga se habían quedad sin margen para inscribir el contrato de La Pulga y entonces, sí, era el final que impactó al mundo.

También las palabras de Gerard Piqué en ‘La Resistencia’ han generado un caldo de cultivo que no ha gustado a la afición. Su confección liviana y el ajuste que se adapta al cuerpo reduce el peso y la resistencia al viento para que te desarrolles en tu máximo potencial. Un gesto habitual en todos los partidos y que hacen todos los futbolistas, ganen o pierdan, en el campo o en el vestuario. La enemistad entre FC Barcelona y Espanyol es tan enconada que incluso un gesto tan común en el fútbol como intercambiarse una camiseta puede ser entendida como una imperdonable ofensa por parte de la afición. Además, el atacante azulgrana nunca se ha caracterizado por la polémica, como otros, cuando hay un derbi de por medio. Los periquitos querían sacar algún punto en el derbi de Barcelona y presentaron una alineación con algunos cambios. Cabe recordar que la semana ha sido muy movida para Messi, quien llegó a Barcelona el martes para arreglar su continuidad.